4 tips para proteger tus manos del frío

Los meses de frío son una temporada dura para nuestras manos y no es de extrañar que tiendan a resecarse más cuando baja la temperatura. Los cambios bruscos de temperatura (la combinación de condiciones de frío en el exterior y de aire caliente seco en el interior de las casas) elimina la hidratación natural de la piel de nuestras manos y, a menudo, la deja áspera, seca y se agrieta. Además, cuando la temperatura baja, nuestro cuerpo produce menos lípidos, que son importantes para que nuestra piel forme una barrera protectora resistente a las agresiones externas.
Protección frente al sol
Puede sonar extraño preocuparse por el sol en invierno, pero aunque lo notemos menos, no podemos olvidarnos del efecto de la luz solar sobre la piel; siendo conveniente emplear un protector, preferiblemente aplicándolo unos 15 minutos antes de salir a la calle. En Nails Factory contamos con Spray Solar para manos, que con su aplicador es ideal para protegernos del sol.
Agua templada
Si bien una ducha calentita es una de las cosas que más apetece durante el invierno, lo recomendable es que la temperatura del agua sea suave. De lo contrario la piel perderá humedad, ya que el calor afecta a la capa natural de aceites que la protege. Si no, deberemos emplear más cantidad de crema hidratante.
Evitar la lana
Otra costumbre asociada al invierno pero que es preferible evitar es el de emplear prendas de lana. Y es que estos tejidos resultan, en muchos casos, irritantes para la piel; y especialmente molestos cuando tenemos las manos secas. El algodón es la mejor alternativa.
Guantes
Nos esforzamos por tener nuestras manos perfectas, y queremos que luzcan. Pero en ocasiones simplemente es mejor no arriesgarse a perjudicarlas; tener un par de guantes siempre “a mano” será la solución.
FORMAS SIMPLES PARA HIDRATAR LA PIEL Y PREVENIR LAS MANOS SECAS
Recuerda beber cada día suficiente agua para hidratar la piel desde el interior.
Evita los secadores de manos con aire caliente y opta por papel o una toalla para secar tus manos después de cada lavado.
Deja de usar jabones agresivos que eliminan la hidratación de la piel y elige en su lugar jabones suaves de manos.
Compra un humidificador para mantener constante el nivel de hidratación de tu hogar.